
BOGOTÁ
El Ministerio de Defensa denunció el «asesinato» de once policías y cuatro soldados entre el 15 y el 25 de abril, mes que ha tildado de «doloroso» para el país, y ha ofrecido una recompensa de hasta 200 millones de pesos para quienes colaboren en la búsqueda de los perpetradores de estos crímenes.
Sánchez ha lamentado que los uniformados fallecidos se encontraban «fuera de combate o de permiso» en diferentes regiones del país en el momento de ser atacados y ha definido estos atentados como una «reacción cobarde y demencial» de los carteles del Clan del Golfo, ELN y disidencias de las FARC de alias Mordisco, ante la afectación de sus estructuras criminales por parte de la Fuerza Pública.
Inseguridad disparada en Colombia
El deterioro del orden público fue criticado este viernes por varios gobernadores que aseguraron que esa situación se debe a que el presidente Gustavo Petro, no ha sabido conducir los procesos de paz, que han sido aprovechados por los grupos armados para fortalecerse.
“Desde el 15 de abril del presente año, más de 30 uniformados han sido atacados por criminales en el departamento. No he visto al presidente Gustavo Petro lamentar esta situación o arreciar con la fuerza pública para combatir a los delincuentes”, dijo en su cuenta de X el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón.
Según Rendón, “la sombrilla de impunidad de la paz total ha propiciado un crecimiento del 70 % de las disidencias de las FARC en Antioquia y del 60 % del Clan del Golfo”.
En ese sentido, dijo que “es momento de desatarles las manos a nuestro Ejército y Policía. La paz no se negocia, la paz se impone con seguridad, justicia y oportunidades sociales”.
“Los criminales son eso: criminales y asesinos. Los nuevos ataques a la fuerza pública en el departamento demuestran que tenemos razón: la paz total fracasó”, subrayó Rendón.
Mientras tanto, el gobernador de Córdoba, Erasmo Zuleta, denunció que en su departamento hay “un ‘plan pistola’ que no da tregua contra soldados y policías”.